El Gobierno porteño reutilizó vehículos secuestrados a organizaciones delictivas para reforzar las tareas operativas de la Policía de la Ciudad y el área de tránsito.
Autos de alta gama, camionetas y motos, que antes representaban el lujo ilícito de los delincuentes, ahora se destinan al bienestar de los vecinos y la lucha contra el crimen.
“Esto tiene un doble mensaje: se le quita un bien mal habido a organizaciones criminales y, además, esos bienes son utilizados para brindar más seguridad”, destacó el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, durante la presentación en Barracas.
La recuperación de bienes en números
La flota incautada y reutilizada incluye:
- 10 autos y camionetas, algunos de ellos de alta gama.
- 11 motos, que serán destinadas a operativos de tránsito.
Estas incorporaciones representan un ahorro estimado de 100 millones de pesos para el Estado porteño, según informó el ministro de Seguridad, Waldo Wolff.
¿Cómo serán utilizados los vehículos?
Los nuevos móviles tendrán funciones específicas:
- Los autos y camionetas se integrarán a las Brigadas de Investigación, sin identificación de patrulla para operar en tareas de inteligencia y prevención.
- Las motos serán empleadas en operativos de tránsito, incluyendo controles de alcoholemia, retenes vehiculares y monitoreo durante eventos deportivos.
“Hoy sumamos más equipamiento y recursos para cuidar a los vecinos. Esto es un avance en nuestra política integral de seguridad”, afirmó Wolff.
Una política de seguridad más amplia
La reutilización de vehículos es solo una de las acciones dentro del plan integral de seguridad de la Ciudad, que incluye:
- 3.000 nuevos policías, llevando la fuerza a un total de 20.000 efectivos en las calles.
- Instalación de videovigilancia en el 75% de los barrios, fortaleciendo la prevención.
- Mejoras en la iluminación de parques y espacios públicos.
- Incorporación de armas no letales en estaciones de subte y centros comerciales.
- Creación de Puntos Seguros, una red de asistencia inmediata en caso de emergencias.
Estas medidas, combinadas con la recuperación de vehículos, fortalecen un enfoque integral para mejorar la seguridad urbana.
La incautación de bienes y su posterior reutilización envían una señal clara. “Quien las hace, las paga dos veces, no solo enfrenta las consecuencias penales, sino que sus bienes ilícitos se convierten en herramientas para mejorar la seguridad de los vecinos”, concluyó Jorge Macri.
Esta decisión, respaldada por la Justicia, refuerza el compromiso del gobierno porteño de combatir el delito de manera efectiva y sostenible, utilizando los propios recursos de las organizaciones criminales en su contra.
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