La seguridad en la Ciudad de Buenos Aires atraviesa un momento crítico tras los hechos ocurridos en la Alcaidía 9 de Liniers.
En respuesta, el Jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y el Ministro de Seguridad, Waldo Wolff, tomaron decisiones drásticas, incluyendo la remoción de la cúpula policial y el Director de Alcaidías.
No vamos a permitir que estas fallas queden impunes, nuestro compromiso es garantizar la seguridad y la confianza de los ciudadanos, declaró Jorge Macri tras finalizar la reunión con el equipo de seguridad de la Ciudad.
El incidente en la Alcaidía 9, ubicada en Gana al 400, desató una serie de medidas que buscan esclarecer los hechos y prevenir futuros episodios.
El operativo incluye cambios en la cúpula de la Policía de la Ciudad y una investigación exhaustiva.
Cambios en la cúpula policial: Pablo Kisch y Jorge Azzolina, hasta ahora jefe y subjefe de la fuerza, fueron removidos de sus cargos. Sus lugares serán ocupados por los comisarios generales Diego Casaló y Carla Mangiameli.
Investigación interna: La Fiscalía General, encabezada por Juan Mahiques, lidera una investigación exhaustiva para identificar responsables dentro de la fuerza.
Requisas y controles: La División Unidad Táctica de Intervenciones en Alcaidías (DUTIA) intensificó sus operativos con requisas sorpresa y controles reforzados.
Además de las acciones locales, los Ministerios de Seguridad de la Ciudad y de la Nación trabajan en conjunto.
La Policía Federal participa en la búsqueda de los evadidos, mientras se coordinan esfuerzos para evitar que este tipo de situaciones se repitan.
Las medidas han generado reacciones mixtas entre los residentes y expertos en seguridad. Algunos celebran la rapidez en la toma de decisiones, mientras que otros cuestionan la efectividad a largo plazo.
“Es positivo ver cambios inmediatos, pero también necesitamos una reforma estructural en las alcaidías”, expresó un analista de seguridad consultado.
Datos clave:
La Alcaidía 9 es una de las más transitadas de la Ciudad, albergando a detenidos en espera de proceso judicial.
Durante el último año, se registraron más de 20 incidentes menores en alcaidías porteñas, lo que subraya la necesidad de reformas urgentes.
Según fuentes oficiales, la investigación podría extenderse varios meses debido a la complejidad del caso.
Este episodio pone de manifiesto las vulnerabilidades en el sistema de seguridad de la Ciudad.
La gestión inmediata de Jorge Macri y su equipo busca restaurar la confianza, pero el camino hacia una solución integral demanda esfuerzos sostenidos y colaboración entre todas las partes.
La reciente fuga de 17 detenidos de la Alcaidía Comunal 9, ubicada en Gana al 400 en el barrio porteño de Liniers, ha puesto en jaque a las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires, generando una serie de medidas inmediatas y una profunda reflexión sobre la seguridad en los centros de detención.
Es alarmante que nadie haya visto o escuchado nada, expresó Juan Bautista Mahiques, Fiscal General de la Ciudad, subrayando la gravedad institucional del incidente.
La Alcaidía Comunal 9, inaugurada en 2022, es una de las más recientes instalaciones destinadas a la detención preventiva en la Ciudad de Buenos Aires.
Sin embargo, el 24 de diciembre de 2024, 17 internos lograron escapar a través de un boquete en una de las paredes, evidenciando serias fallas en la seguridad del recinto.
Detalles de la fuga: Los detenidos, 11 de nacionalidad argentina y 6 chilenos, abrieron un agujero en la pared y escaparon durante la noche.
Hasta el momento, solo dos han sido recapturados: Jorge Nahuel Alet, de 33 años, y Axel Romero, de 21, ambos con causas relacionadas con robos.
El Jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, junto al Ministro de Seguridad, Waldo Wolff, decidieron remover al jefe y subjefe de la Policía de la Ciudad, Pablo Kisch y Jorge Azzolina, siendo reemplazados por los comisarios generales Diego Casaló y Carla Mangiameli, respectivamente.
La Fiscalía General, liderada por Juan Bautista Mahiques, ha iniciado una investigación para determinar posibles negligencias o complicidades dentro de la fuerza policial.
«Es de una gravedad institucional importante», afirmó Mahiques, resaltando la necesidad de esclarecer cómo ocurrió la fuga sin que nadie lo advirtiera.
La División Unidad Táctica de Intervenciones en Alcaidías (DUTIA) ha intensificado las requisas y controles en todas las alcaidías de la ciudad para prevenir futuros incidentes.
Asimismo, se ha establecido una colaboración estrecha entre los Ministerios de Seguridad de la Ciudad y de la Nación para coordinar la búsqueda de los 15 prófugos restantes.
Impacto en la comunidad: La fuga ha generado preocupación entre los vecinos de Liniers y zonas aledañas, quienes demandan mayores garantías de seguridad.
Organizaciones de derechos humanos también han expresado su inquietud por las condiciones de detención y la eficacia de las medidas de seguridad en estos centros.
Datos clave:
- La Alcaidía Comunal 9 fue inaugurada en 2022 como parte de un plan para modernizar los centros de detención en la ciudad.
INFOBAE - Desde su apertura, no se habían registrado incidentes de esta magnitud en la instalación.
- La capacidad de la alcaidía es para alojar a 100 detenidos, aunque al momento de la fuga se encontraba al máximo de su capacidad.
Este incidente en la Alcaidía Comunal 9 de Liniers expone las debilidades en el sistema de detención preventiva de la Ciudad de Buenos Aires.
Las autoridades han tomado medidas inmediatas, pero la confianza de la ciudadanía dependerá de reformas estructurales y una vigilancia constante para garantizar que situaciones similares no se repitan en el futuro.