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Nación y Ciudad alcanzan acuerdo sobre Coparticipación

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Jorge Macri anunció que se llegó a un acuerdo y que, a partir del 1 de agosto, el Gobierno Nacional comenzará a cumplir con la medida cautelar de la Corte Suprema que establece que la Ciudad debe recibir el 2,95% por coparticipación.

“Se cumplirá con lo que indica la Corte a partir del 1 de agosto, en el porcentaje señalado. Además, iremos juntos a la Corte para dialogar. El pago de la deuda será parte de esa conversación.

Estamos tranquilos porque a partir de ese momento se empezará a cumplir con esta indicación y buscaremos juntos una solución definitiva a este conflicto”, dijo Macri a la prensa.

El Jefe de Gobierno calificó de “muy buena” la reunión de esta mañana con el ministro de Economía, Luis Caputo, para asegurar el cumplimiento del fallo de la Corte Suprema y desbloquear los fondos que le corresponden a la Ciudad por la Coparticipación Federal.

“Es fundamental ir juntos a la Corte Suprema para alcanzar un acuerdo definitivo, que nos brindará tranquilidad a todos: a la Ciudad y a la Nación”, afirmó Macri, quien estuvo acompañado por el ministro de Hacienda de la Ciudad, Gustavo Arengo.

“El ministro Caputo está cumpliendo con su compromiso, lo que nos brinda tranquilidad. Este Gobierno heredó el problema y no fue el responsable de la reducción de recursos. Apreciamos que esté cumpliendo, aunque sea unos meses después, con lo que la Corte dictó a partir del 1 de agosto”, añadió.

Destacó la importancia de respetar “los fallos de la Corte, especialmente en un país que busca atraer inversiones. Esto nos da tranquilidad porque permite que la Ciudad mantenga su funcionamiento y las inversiones previstas, y nos ayuda a buscar una solución a largo plazo”.

Explicó que “este dinero es crucial para la Ciudad, ya que necesitamos seguir pagando a los maestros, a los docentes, realizar obras hídricas, inversiones en seguridad y salud. Esto nos proporciona la seguridad necesaria. Aunque las cifras sean grandes, lo esencial es que la gente sepa que a partir del 1° de agosto la Ciudad contará con los recursos para continuar con su plan de mejora operativa como estaba previsto”.

Al final de la conversación con los periodistas, aclaró: “Nunca suspendimos ninguna obra pública. Estos seis meses los hemos mantenido con recursos que teníamos ahorrados. Por lo tanto, hasta ahora no ha habido afectación”.

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Desde el 9 de septiembre de 2020, la Ciudad ha dejado de recibir más de 4,8 billones de pesos. Antes de esta reducción en la Coparticipación, esos fondos representaban el 25% del total de ingresos de la Ciudad.

Para poner esto en perspectiva, el monto adeudado por el Gobierno Nacional equivaldría a más de 3 años del gasto anual en inversiones para obras públicas y mantenimiento, que incluye hospitales, escuelas, iluminación, espacios verdes, red pluvial, semáforos y asfaltado.

También representa más de 4 años y medio del presupuesto destinado a Promoción Social, que cubre subsidios a personas de bajos ingresos, el transporte público, la alimentación en comedores comunitarios, la atención a personas en situación de calle y el mantenimiento de paradores, entre otros.

Para mantener una administración eficiente, la actual gestión de la Ciudad implementó medidas de austeridad y reestructuración operativa. Estas medidas incluyeron la reducción del tamaño del Estado, la revisión y recorte de contratos, una disminución del 40% en el alquiler de edificios y la postergación de obras de infraestructura.

La administración nacional anterior, encabezada por Alberto Fernández, no cumplió con la medida cautelar dictada por la Corte Suprema el 22 de diciembre de 2022, que establecía un coeficiente de Coparticipación del 2,95% para la Ciudad de Buenos Aires, en lugar del 1,4% que se recibe actualmente.

Sobre la coparticipación

En Argentina es un mecanismo de distribución de recursos fiscales entre el Gobierno Nacional y las provincias (o la Ciudad Autónoma de Buenos Aires).

Su objetivo es equilibrar el ingreso fiscal entre las distintas jurisdicciones para asegurar que todas reciban una parte justa de los ingresos nacionales, particularmente los derivados de impuestos nacionales.